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24 febrero 2007

el bosque por terríkola


Un dia excelente para ir a la cueva,pensó Ezequiel al levantarse.Caían pequeños copos sobre su jardín y las montañas estaban completamente nevadas. Fue a la plaza,donde había quedado con sus amigos, sara y sebastián, para subir colina arriba. Llevaban ya un par de horas de camino, cuando reparó en que Sara no había hablado aún,estaba un poco pálida y cansada así que decidieron hacer un paro en una pequeña llanura. Aun quedaban un par de kilómetros hasta llegar al refugio pero no hacía frío y era temprano asi que,¿por que no?,esperarían un rato.Encendieron un pequeño hornillo para calentarse.Sara estaba sudando.¿Que te pasa Sara?,estás sudando.Pregunto sebastián.No he dormido bien,he tenido pesadillas y... ¿por qué fue una pesadilla,no? pensó Sara.No se, me encuentro muy rara,dijo mientras se apretaba las manos con nerviosismo. Jajajaja rió con estruendo Ezequiel, desde luego que no cambiarás,eres mayorcita para tener miedo,¿no crees?En fin descansa que subiré un poco para ver el camino,hay demasiado hielo,quizás tengamos que calzarnos con las púas.Ezequiel,se perdió entre los árboles y junto al fuego se quedaron sus dos amigos .Sara temblaba,pero no era por el frío. Una extraña sensación le recorría el cuerpo.Sebastián la miraba callado,no le gustaba su mirada, estaba vacia ."¿Que le pasará?" .Al cabo de una hora bajó Ezequiel,cansado de caminar.Tendremos que refugiarnos por aquí,el camino es inaccesibleble.He visto una casa cerca,había luz pediremos refugio por esta noche y mañana regresaremos a casa,ya subiremos otro dia.Así que recogieron sus cosas y caminaron hacia la casa.Al llegar,se quedaron mirando fijamente a la puerta,era raro ver una cruz de madera clavada justo en la entrada.¿Que queréis?se olló ¿no sabéis,que las bestias rondan por aquí cerca?Huelen la sangre fresca...hizo una pequeña mueca de miedo¿Que dice?jajajaja¿bestias? nos conocemos muy bien este bosque.Vivimos en la aldea,hemos venido muchas veces por aquí.Dijo Ezequiel.Ya,claro.En fin,que quereisPasar la noche.Subiamos hacia la cueva y mi amiga se ha puesto enferma. No podemos seguir y ya oscurece para bajar al pueblo.¿Le importaría?pagaremos los gastos si es necesario...Tranquilos,dijo el hombre,pasad es mejor que esteis aquí,fuera es muy peligroso.Por cierto,mi nombre es Serch.Los tres amigos se instalaron en aquella casa,había un fuego encendido y...que era ese olor... ¡ajos!Los tres se miraron extrañados.Habían muchos ristras de ajos colgadas por todas las paredes,pero ¿por que?.Sara temblaba,se movía tambaleándose de arriba abajo de la casa.Sebas y Ezequiel la intentaron calmar, y al cogerla por los hombros... ¡¡DIOS!! que era eso? , dos marcas rojas ardian en su cuello. La soltaron instintivamente y ésta comenzó a gritar como si fuese a acabársele la vida...Serch contemplaba la escena horrorizado. Al fin se acercó, agarró a Sara y le examinó el cuello.Tengo un problema,, dijo el dueño...¿Cuál? contestó EzequielVosotros sois mi problema.Cojed vuestras cosas y largaos de aquí.No tardarán en venir a buscarla... ¡¡No quiero morir!! Sebas y Ezequiel estaban confusos,¿morir?¿quién va a venir?El hombre temblaba atemorizado. Cuando abrió la puerta para echarlos, un torrente de aire le echó hacia atrás. Amenazaba tormenta. Ya era demasiado tarde.Cerró la puerta como pudo,y sin decir nada arrastró a la chica, que ahora permanecía inmovil, hasta el cuarto trastero. La ató con una soga.Abrió el baúl y saco una ballesta con estacas.¿Que haceis ahí parados?Ayudadme rápido.No tardarán.¿Quién?que pasa,que está haciendo.¿Quien vendrá,por qué ha at...¡BASTA! ¿Es que no lo entendeis?Vuestra amiga a sido marcada por ellos,cortó en seco¿Por quién?preguntó Sebas, contrariadoEl silencio reinó por un instante en la casa.Si quereis vivir,ayudadme a sellar la puerta y las ventanas.Sin contestar,los dos amigos hicieron caso,terminaron y callaron.Serch empezó a contar la historia de la muerte de toda su familia a manos de los...¡¡VAMPIROS!! Gritaron a la par Sebas y Ezequiel.Temblaban horrorizados.Ahora lo entendian todo.La cruz, los ajos... Eran las tres de la mañana cuando Sara empezó a chillar de nuevo. Cuando entraron en el cuarto se quedaron de piedra.Sara levitaba a medio metro del suelo, y un humo blanquecino que se filtraba por la estrecha rendija de la ventana sellada, la rodeaba. De repente aquella extraña niebla comenzó a tomar forma humana. Tenía largos cabellos negros, ropaje oscuro, y en su tez pálida... dos colmillos brillantes y afilados. Serch y los dos amigos contemplaban la escena horrorizados, y antes de que pudieran reaccionar, el vampiro ya había clavado sus colmillos en el cuello de la chica. En un instante había desangrado a Sara, que yacía en brazos de aquella bestia. El vampiro levantó el rostro; sus ojos estaban bañados en sangre. Miró a los chicos y sonrió. Había comenzado...Cuando Serch pudo reaccionar, alzó su ballesta e hirió al vampiro en un brazo, lo que hizo que Sara cayera a plomo en el suelo. La segunda estaca fue directa al corazón. Murió.Se hizo el silencio.Ezequiel y Sebas estaban atónitos ,presos del pánico. Al instante se oyó bullicio fuera. Serch guardó su ballesta.Acompañadme,dijo.No podian,no respondian sólo el ruido del cerrojo les despertó.Sin saber como,siguieron a Serch.Cuando salieron fuera...Sólo podían temblar."¿qué es esto?¿que pasa? ¡¡Quiero despertar!" pensaron.Fuera habian decenas de "seres",mirándoles con sus rostros pálidos y fieros sedientos de sangre,blandiendo luminosas antorchas,en medio de todos ellos..."no puede ser" pensó Sebas..."¡¡SERCH!!"¿Por qué maestro?dijo uno de aquellos seres,¿Por qué le has matado?Era mía,dijo,os lo advertí.Se lo que estais pensando¿las cruces,los ajos...?,dijo dirigiendose a los muchachos,todo son leyendas. Lo único cierto es lo de las estacas...Hasta hoy. Hoy es una noche gloriosa para nuestra especie gritó.Por fin se cumplirá la profecía y todos nosotros seremos invencibles y conseguiremos sembrar el terror por todos los rincones. Dice la profecía: "cuando tres almas se pierdan en la noche del segundo día del segundo mes del año de cantedonium ,todos volveremos a reinar.Sacrificad a tres mortales,alimentaos cuando se esconda la luna y desangrarlos cuando sea llena"citó textualmente.¡Hoy es ese día!¡hoy seremos la muerte!¡Seremos invencibles!¡HOY CREAREMOS NUESTRO INFIERNO!A partir de ahí, Sebas y Ezequiel ya no vieron nada,sólo sentían el dolor y cientos de colmillos clavándose en su yugular. Cuando despertaron, ya no sentían nada.Junto a ellos estaba Sara y entre sus brazos yacía una anciana bañada en sangre. Entonces comprendieron. Ahora era su turno.Llegó la hora de matar...